Artículos | Cómo colocar un tampón con aplicador
Cómo colocar un tampón con aplicador
Los tampones son un producto especial para la higiene femenina que ofrece comodidad y seguridad. Es normal que las mujeres que los utilizan, por primera vez, tengan que intentarlo varias veces antes de colocar el tampón de una forma fácil.
Colócate en una posición cómoda, con los músculos relajados.
Las posturas que te pueden ayudar a introducirlo, sin problemas, son: De pie, con las rodillas ligeramente dobladas y separadas, con un pie sobre el WC (sanitario).
- Lávate las manos.
- Retira el envoltorio del tampón y comprueba que el cordón está bien atado y colgando fuera del aplicador.
- El mecanismo del aplicador es parecido al de una jeringuilla. Sujeta el tampón por el mecanismo aplicador con los dedos pulgares y corazón, dejando el índice en la base. Con la otra mano, abre la apertura vaginal suavemente y coloca la punta redondeada del aplicador en el orificio vaginal (en la misma apertura por donde sale el flujo).
- Introdúcelo de forma inclinada hacia tu espalda, dando pequeños giros.
- Desliza el tubo de inserción externo completamente dentro de tu vagina, hasta que tus dedos toquen el cuerpo.
- Empuja el tubo de inserción interno, con tu dedo índice, hacia adentro hasta que quede dentro del primero. De esta forma el tampón quedará correctamente ubicado en tu vagina.
- Retira ambos tubos aplicadores hacia fuera.
- El cordón quedará colgando fuera de tu cuerpo.
Cuando el tampón se coloca correctamente no se siente nada.
Si te sientes incómoda significa que no has insertado el tampón a la profundidad suficiente. Debes retirar el tampón y usar uno nuevo asegurándote de que lo insertas profundamente.
Cómo quitarse un tampón
Para retirar el tampón, dobla ligeramente las rodillas con las piernas abiertas y relájate.
Tira del cordón hacia fuera, en la misma dirección que lo introdujiste.
Si sientes incomodidad al retirar el tampón y ves fibras blancas, puede ser que todavía no esté saturado. Por este motivo, siempre recomendamos usar tampones de menor absorción a tu flujo.
Consejos prácticos
Infórmate sobre el síndrome del shock tóxico (SST) que es una enfermedad rara pero grave que está relacionada con el uso habitual de tampones.
Elije tampones que:
- Cuenten con un velo de seguridad para evitar que se peguen, “rasquen” y te dejen residuos en tu interior. Notarás la diferencia al extraerlos, especialmente en los últimos días.
- Su núcleo absorbente sea de puro algodón 100% hipo alergénico, dermatológicamente testado, que te ayudará a prevenir los riesgos de irritaciones, picores y alergias.
- A lo largo de tu vida puedes llegar a utilizar más de 12.000 tampones, por este motivo es fundamental que compruebes la composición y diseño de los productos que utilizas.